-Ah... pues, gracias.
-Espera, ¿has dicho "gracias"?
-Entonces... gracias, ¡muchas gracias!
-¿Y ya está? ¿Te abro mi corazón y me dices... "gracias"?
-Pero ¿qué quieres? ¿Que te mienta?
-No, quiero que te mueras, ¡insensible cabrón, hijo de puta!
(Two and a Half Men)
Un bon exemple del fet que no sempre el logos serveix per comunicar-nos.
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